Personajes literarios

Definición

Los personajes literarios son aquellos que realizan las acciones dentro de la historia, influyen en su devenir. Pueden ser reales o ficticios. Estos pueden ser humanos, sobrenaturales o simbólicos.

Los personajes literarios son creados por el autor del texto y, justamente ellos son los encargados de darles determinadas cualidades, debilidades, particularidades que será útiles dentro del relato.

Por ejemplo: Emma Bovary de “Madame Bovary” (Gustave Flaubert), Ulises de “La Odisea” (Homero), Pierre Menard de “Pierre Menard, el autor del Quijote” (Jorge Luis Borges), La Maga de “Rayuela” (Julio Cortázar). 

Tipos

Según la función que cumplen, los personajes se clasifican en:

• Principales: aquellos que más importancia tiene dentro de la historia, es el más desarrollado, a quien le suceden la mayoría de las cosas. Aquí, pueden distinguirse según su rol, los protagonistas y los antagonistas. Por ejemplo: Florentino Ariza de “El amor en los tiempos del cólera” (Gabriel García Márquez).
• Secundarios: aquellos que cooperan con el personaje principal, aparecen a menudo, intervienen en gran parte de las acciones de la trama. Por ejemplo: Lorenzo Daza, padre de Fermina Daza, enamorada de Florentino Ariza, de “El amor en los tiempos del cólera” (Gabriel García Márquez).
• Terciarios: aquellos que poseen menor importancia en la historia, pero cumplen una función igualmente. Por ejemplo: algunas de las 662 mujeres con quienes Florentino Ariza tiene un romance, pero no son nombradas.

Según la caracterización, los personajes se clasifican en:

• Redondos/Dinámicos: aquellos más complejos, con un perfil psicológico bien definido. Presentan siempre una transformación interna, una evolución en la historia que desarrollan.
• Planos/Estáticos: aquellos que se presentan de manera más simple, generalmente son predecibles. Estos personajes no evolucionan dentro de la trama. Son personajes tipos que pueden repetirse.

Además, los personajes literarios pueden clasificar en:

• Arquetípico: aquellos basados en modelos de conducta, con características y elementos propios de determinada manera de comportarse. Por ejemplo: Ulises de “La Odisea”, por su conducta es el arquetipo de un héroe.
• Estereotipo: aquellos basados en comportamientos reconocibles en una sociedad, con características concretas. Por ejemplo: Horacio Olivera, el intelectual bohemio, de “Rayuela”.

Ejemplos

• Aureliano Buendía, “Cien años de soledad” de Gabriel García Márquez.
• Phileas Fogg, “La vuelta al mundo en 80 días” de Julio Verne.
• Lisbeth Salander, Saga Millennium de Stieg Larsson.
• Martín Fierro, “Martín Fierro” de José Hernandez.
• Marple, cuentos de Agatha Christie.
• Elizabeth Bennet, “Orgullo y prejuicio” de Jane Austin.
• Ireneo Funes, “Funes, el memorioso” de Jorge Luis Borges.
• Esteban Trueba, “La casa de los espíritus” de Isabel Allende.
• Jay Gatsby, “El gran Gatsby” de F. Scott Fitzgerald.
• Frankenstein, “Frankenstein” de Mary Shelley.
• Silvio Astier Drodman, “El juguete rabioso” de Roberto Arlt.
• Bernarda Alba, “La casa de Bernarda Alba” de Federico García Lorca.
• Leopold Blomm, “Ulises” de James Joyce.
• China Iron, “Las aventuras de la China Iron” de Gabriela Cabezón Cámara.
• Romeo Mostesco, “Romeo y Julieta” de William Shakespeare.
• Vladimir y Estragón, “Esperando a Godot” de Samuel Beckett.
• Tita, “Como agua para chocolate” de Laura Esquivel.
• Gabriel Syme, “El hombre que fue jueves” de G.K. Chesterton.
• Heinrich Fausto, “Fausto” de Johan Goethe.
• Lázaro Gonzáles Pérez, “El lazarillo de Tormes” de Alfonso de Valdes.
• Sherezade, “Las mil y una noches”, anónimo.
• Cipriano Algor, “La caverna” de José Saramago.
• Winston Smith, “1984” de George Orwell.
• Ana Karenina, “Ana Karenina” de León Tolstoi.
• Guillermo de Baskerville, “El nombre de la rosa” de Umberto Eco.